1980 se abría paso en el calendario, descorchando un mas que intenso y novedoso (en lo que a marcas respecta) panorama en el motocross nacional.
La llegada de las primeras importaciones ( europeas, por supuesto) diseñaba una parrilla de salida con cierta reminiscencia a “torre de babel”.
La caida de iconos de una época anterior, como los tandem Toni Elías(Bultaco) o
Fernado Muñoz (Montesa) dejaban entrever que como en la canción de Bob Dylan..los tiempos estaban cambiando....
Fernado Muñoz se hacia con una recién importada Maico para la categoría 250 c.c y Gilera para la de 125c.c.
Toni Elías desmontaba del proyecto de Bultaco "Pursang MK 15", para afinanciarse en la fabrica de Martorelles , DERBI, donde compartiría andanzas bajo la atenta mirada de su pupilo Alex Llobet, en la aventura de Derbi en el motocross ,iniciada días atrás por Rafa Olmedo.
Mientras Toni Arcarons, Carlos Mas, Domingo Illa o Juanjo Barragán, entre otros seguirían fieles a la factoría de Esplugues de llobregat, Montesa.
En menos de 12 meses la llegada de las marcas extranjeras se consolidaría. La germana Maico engrosaría sus filas con una nueva hornada y corredores con un gran potencial como potencial como Florencio Hélices, Carlos Tertre, Félix Millet, Torrente o Enrique del Rey.
Domingo Illa , el larguirucho de Elda ( Alicante) Pablo Colomina o Tello optarían por Gilera siguiendo la estela del malogrado “Randy” Muñoz.
Antes de mitad de la década las parrillas se convertirían en un autentico hervidero de marcas, con la llegada de SWM, donde Albert Ribó acabaría su carrera de piloto, el blanco de las KTM, marcaría también parte de ese relevo generacional, haciéndose con los servicios de Colomina, Zabala, o Mendoza... entre otros.
El romántico Trofeo Montesa, una autentica formula de promoción de la marca catalana, veía su fin en su sexta edición ganada por Agustí Vall.
El Trofeo Montesa se consolido hasta 1981 como un autentico vivero de grandes corredores del motocross nacional y en algunos casos Enduro.
En 1981 Anvian uno de esos ingeniosos proyectos antes mencionados, hacia su aparición a manos de Oriol Pons. Ese mismo año la marca catalana creaba también su propio trofeo formula de promoción, que muy a pesar de la singularidad de estar abierto a todas las marcas, no tendría, el éxito esperado.
Mientras todo esto ocurría en el motocross de aquí, los rugidos del mejor motocross internacional, seguían aturdiendo la comarca del Valles Occidental, con las ediciones del G.P. del Mundial de 250 c.c de motocross, llevado acabo con la garantía de la Peña Motorista 10x Hora.
En la zona poniente de Catalunya, la gente del Moto Club Segre se encargaría de hacer lo propio con el G.P. Mundial de 125 c.c de motocross, en un mas que mítico trazado de “El Cluet” en la localidad de Montgai (Lleida).
En fin amigos esto mas o menos cuanto acontecía en el panorama del motocross de aqui al inicio de la década de los 80’s ,o por lo menos cuanto llegamos a percibir esa generación de aficionados al motocross mientras soñábamos entre el barro y la gaseante olor a Motul, en un tiempo en que el póster de“ El Esfuerzo” presidía el lugar más importante de nuestra habitación, como máxima expresión de Motocross...que no MX...
Manel Martínez